viernes, 19 de octubre de 2012

Fiesta con los amigos de la Compañía


Empezamos a prepararnos para este día con una reunión entre nosotras tres para planear. Estábamos un poco nerviosas por no saber dónde poner tanta gente en nuestra casa tan pequeña. No es como en Gujarat donde la gente se sienta en el suelo y el espacio nunca es problema. Aquí no solo falta espacio, también sillas. 

Después tuvimos otra reunión para preparar lo que queríamos transmitir de nuestro Carisma, así como algo de comida y algunos juegos para disfrutar después. 


Todas nos pusimos a trabajar los detalles. cada una se responsabilizó de una parte. Nos quedamos con algo sencillo que preparamos en casa. 


Para poder acomodar todos tuvimos que vaciar todo los muebles de la casa arriba y poner sillas. Los vecinos de todos lados vinieron a nuestro auxilio y nos dieron sillas, y al final tuvimos suficiente para acomodar muy bien a 60 personas. 



Dimos el mensaje de quiénes somos y qué hacemos, como primer paso para despertar en ellos el espíritu misionero. Fue interesante notar cómo la gente nos veía y nos observaba, y fue esperanzador leer el “feed back” de algunas de las vecinas en una carta que nos escribieron. En ella, expresando su gratitud, dicen: “La charla de introducción seguido por el vídeo era una revelación de servicio misionero hacia la gente en áreas tan lejos de Surat. Vuestra manera de vestir como la gente es una indicación de vuestra SER y HACER con ellos, desde ellos y para ellos. La afección y el interés colectivo”. 


Nosotras podemos decir que esta ocasión nos ha traído muy cerca a la gente de nuestra calle. Más tarde nos dijeron “Ahora entendemos por qué sois como sois después de todo lo que hemos visto y oído hoy”. 


Puedo decir que esto ha sido posible gracias a todo el trabajo realizado a lo largo de los años por las hermanas que nos han precedido. Las hermanas que han pasado por aquí en su manera ha dejado el espíritu misionero vivo.