martes, 17 de diciembre de 2013

Navidad 2013


De nuevo nos encontramos en ese momento del año donde emociones y sentimientos parecen aflorar entre alegrías y tristezas, derroche y sencillez, soledad y solidaridad. A veces, incluso, hace que nos olvidemos un poco de lo mal que estamos para hacernos creer a otros y a nosotros también que es un momento para estar bien, pero, ¿lo estamos?.  Aquí entra esa parte donde la reflexión personal se impone para que cada uno y cada una intentemos responder a la pregunta. ¿Qué buena nueva es motivo de mucha alegría para mí y para mi pueblo?, ¿sabemos reconocer al Dios con nosotros que vive en nuestro pueblo? Si miramos positivamente y tenemos un poco de fe, sí, seguramente que encontraremos muchas buenas nuevas que pasan a nuestro alrededor y que nos hacen creer en el milagro de la Navidad.

Una de las Buenas Nuevas la he encontrado en Pujilí (Ecuador) donde se realizó el VII Encuentro Continental de Teología India y cuyo Mensaje Final dice: 

La Buena Noticia de Pujilí: “Les anunciamos una Buena Noticia para todos y para todas: ¡El Buen Vivir!.  Simbolizada en una Vasija de Barro. El Buen Vivir/ Buen Convivir se manifiesta en no ser perezoso, mentiroso y ladrón; es actuar, soñar, reconstruir la Vida misma; se trata de una radical apuesta por la Vida Plena y Abundante, para todos y para todas, no sólo para unos cuantos. Nos muestra el horizonte de nuestras luchas hacia una vida digna y justa. Esta herencia milenaria nos une en un proyecto común desde la diversidad de nuestros pueblos; es para quienes vivimos y cohabitamos este hermoso planeta”. Así también nos lo exige el mismo Jesucristo: “He venido para que tengan vida y vida en abundancia” (Jn 10,10) 

Este es nuestro clamor y nuestra palabra esperanzadora para toda la humanidad. 

Y recogiendo las palabras de Francisco I: “No debemos tener miedo de la bondad, más aún, ni siquiera de la ternura”, “emprendamos un camino de amor y confianza en todo el mundo”. ¿A qué nos compromete esa llamada a emprender un camino de amor y confianza en todo el mundo? Es una llamada a expresar, encarnar, compartir, celebrar el regado de la vida y transmitirlo. Es una llamada a comunicarnos, a profundizar la relación o a corregir relaciones indebidas –aquellas que niegan, distorsionan o impiden que surja la dignidad humana-, mientras nos hacemos volver mutuamente al poder de la persona. Estamos llamados a viajar de este modo, a permanecer en y con este poder radicar del Amor. 

El camino está trazado… QUE TENGAMOS UNA ¡FELIZ NAVIDAD! 

Las Buenas Nuevas

La mujer que había dado a luz en un autobús (desde Marruecos) 


Gertrude, nos comparte el encuentro que tuvo con una joven nigeriana que había dado a luz en un  autobús.

“Llegó al hospital donde yo trabajo, muy asustada, con toda la ropa sucia y llena de sangre..., y sin tener con qué cambiarse..., y así, corriendo, le llevé todo lo qué le pudiera servir.

Buscaron ropa de bebé y la mamá, le limpiaron la sangre y le ofrecieron comida..., pero no podía hablar con ella porque solo sabía inglés y su dialecto. La muchacha tenía mucho miedo de la policía y de la gente en general..., pero cuando me vio, se puso contenta y se sintió más segura... Yo lo único que la pude comprender por señas fue que su marido estaba en Tánger y que tenia 3 niños ... 

Gracias a Dios, esa tarde vino el P. Mateo de Fez, que habla inglés y que también ha trabajado en Nigeria, y fui con él y con una Hermanita de Jesús al hospital ..., y así nos enteramos que era cristiana católica, que había tenido problemas con su marido y se había ido de la casa, (por supuesto, los dos sin papeles, pero que con la nueva política de Marruecos, ahora , no tienen tanto problema ... porque la policía hace la vista gorda ...), y tiene un hijo de 3 años, no 3 hijos como yo había entendido ... Estuvo cinco días internada en el hospital, luego la llevé a nuestra casa. En nuestra casa comió, se duchó, le dimos una maleta para que metiera todo lo que le habían regalado y le compramos el billete de autobús para Tánger. Allí, la iba a recoger el marido, ya que había hablado con él por teléfono…y se fue tan contenta.”



Acercándonos a nuestros hermanos y hermanas en la cárcel, ayudándoles para nacer de nuevo (desde India)

 

En el contexto de ese título, quiero compartir una experiencia de Pastoral en la Cárcel donde una hermana de la Compañía Misionera trabaja.

A lo largo de estos últimos tres meses, las visitas al Centro de Reclusión para Delincuentes Juveniles han sido una experiencia reveladora.


Es desgarrador escuchar la variedad de historias narradas por los internos que suelen ser chivos expiatorios de las malas tendencias de la sociedad. Están muy afectados con muchas malas inclinaciones y los recuerdos del pasado recibidos de sus padres y la sociedad. Junto con otros dos animadores de la Parroquia de San Andrés, en Mumbai, les visitamos todos los martes pasando la tarde con ellos. Lo único que hacemos es escucharles y acompañarles con cariño en su caminar (de sus sueños rotos y destrozados) con esperanza y optimismo…hacia una ¡vida nueva!

A la luz de nuestro Carisma, este breve tiempo ha sido una experiencia estimulante y de fortalecimiento en el proceso de comunicar la “Buena Nueva” a los marginados y desanimados, en su situación desesperada y desamparada.

Era el 19 de agosto de 2013, que nosotros, los voluntarios de cinco parroquias, celebramos el día de la “Pastoral de la Cárcel” y el día de la “Independencia” en el Centro de reclusión para delincuentes juveniles en Umerkhadi, Mumbai, donde tienen 300 presos. El programa se inició con una oración y luego una canción. Después de lo cual los niños estaban felices de salir al escenario para cantar y bailar. Lo que destacaron del programa fue una “muestra mágica” y “mimetismo” junto con las mascotas y payasos que se ganó todos los aplausos del espectáculo trayendo alegría y sonrisa en sus caras. El programa se concluyó repartiendo dulces y aperitivos a cada uno.

Fue un tiempo bien aprovechado con los más débiles y olvidados, trayendo alegría y olvidando, por un rato, la tristeza y monotonía de su vida ¡Alabado sea el Señor!

Puriel Fernández

Astrid nos comparte su paso por Madrid

Astrid, laica de la Compañía en Perú, nos cuenta brevemente su visita a la Compañía Misionera Del Sagrado Corazón De Jesús en Madrid.

“El pasado 16 de Octubre tuve la oportunidad de conocer a las hermanas y al grupo de laicas de la compañía. Conversamos mucho e intercambiamos ideas, nos comunicamos más que nada sobre cómo llevamos nuestras reuniones, cuál era la metodología y frecuencia de ellas. También les compartí desde cuándo y qué fue lo que me llevó a integrar el grupo, cómo sentí el llamado y lo feliz que estaba de pertenecer y de ser una parte de la compañía Misionera. Todas referimos lo positivo que había sido el encuentro”.

¡NAVIDAD!

Navidad acontece en el camino, en las huellas que entretejen pertenencias que guían el horizonte y que sostienen la marcha. En el camino, calles y plazas, donde acontecen también nuestras luchas populares cuando nos hacemos cuerpo plural por una vida más digna.

Celebro la Navidad porque me evoca lo importante que somos cuando nos abrazamos y del poder que tenemos cuando nos hacemos uno, aún en la distancia de tiempos y lugares.

Celebramos la Navidad porque nuestra fe nos habla de estas cosas nuestras cotidianas en el relato de un niño que nació en el camino y que se hizo pueblo a lo largo del camino. Un niño abrigado en la provisoria solidaridad del camino donde el misterio de la Vida se hace fiesta.